Se acabaron las clases, a menos de una semana para el comienzo de exámenes todo lo que deseo es poder terminar los trabajos y estudiar para aprobar este curso.
Siento que el tiempo nunca es suficiente y que con materias tan amplias como la de Tendencias Contemporáneas de la Educación, harían falta más de 8 meses para pulir bien todo su contenido.
Hemos hecho un recorrido o un viaje en el tiempo por la educación desde el siglo XVIII. Es un viaje de muchos años, en el que debes conocer a muchos pedagogos y estudiosos de la educación y en el cual por mucho que quiera no recuerdo bien a todos ellos...si a Rousseau como ese referente que influye en la creación de la Escuela Nueva o a Ferrer i Guardia como pedagogo libertario y fundador de su Escuela Moderna. Cada uno tiene sus ideales, su teoría y sus experiencias propias dentro de la docencia. Son muchos los que como ellos intentan mejorar la educación y mirar por lo intereses del niño, pero a la vista está que siempre debemos ir evolucionando y mejorando todo lo que hemos heredado de sus mentes.
La carga de trabajo ha sido mayor en el segundo cuatrimestre, tal vez por el poco tiempo y la rapidez con la que se desarrollan los temarios. El volumen de prácticas también era superior en este segundo cuatrimestre lo que ha hecho que haga un sprint final para acercarme a la meta.
Los trabajos en grupo han sido uno de los principales inconvenientes, la dificultad para quedar y la poca iniciativa de algunos, hace difícil la cooperación y el acuerdo entre las partes, y es que cuando se trata de trabajo sobran las amistades si no hay un compromiso.
Sin embargo de todo se aprende, y en este caso lo que esta asignatura ha aportado a mi experiencia educativa lo resumo en los siguientes puntos:
- La planificación tanto de los trabajos como de los contenidos que debemos estudiar.
- El valor de la comparación de las teorías educativas a lo largo del tiempo, lo que nos permite comprender mejor las diferencias que existen entre unos modelos y otros y la causa y consecuencias que tienen los cambios.
- La importancia del estudio del pasado para la mejora o perfeccionamiento de la pedagogía en el futuro.
De esta forma puedo decir que estoy bastante satisfecha con el trabajo realizado en este curso y el desarrollo de la asignatura. Un maestro nunca deja de aprender, debe renovarse y adaptarse a cada contexto, fijándose en los factores que afectan a la educación y buscando soluciones a los contratiempos que en ella puedan surgir.
Feliz de estar donde estoy y con motivación, a pesar de todo, de seguir adelante para formar parte el día de mañana de lo bonito de la docencia.
El tema del Póster es Ferrer i Guardia y la Escuela Moderna. El trabajo pretende dar los puntos claves y concisos que rodean al protagonista y a su contexto.
En primer lugar se habla del contexto histórico en el que nos encontramos, a finales del siglo XIX y principios del XX. Esta época está marcada por la cuestión social, empiezan a surgir movimientos antimonárquicos, con la Guerra de Marruecos como antecedente. Esta sociedad se ve afectada por un alto analfabetismo, un proletariado incipiente y una serie de movimientos obreros que luchan por los derechos del trabajo.
Tras introducirnos en el contexto histórico continuamos hablando sobre Ferrer i Guardia, haremos una breve biografía.
En su juventud el ambiente de Ferrer i Guardia estuvo marcado por las relaciones con personajes antimonárquicos, masones, republicanos, anarquistas y librepensadores. Era un pedagogo literario que fundó la Escuela Moderna en el año 1901 y que fue acusado y fusilado por creer que participó en la Semana Trágica de Barcelona en 1909. Ferrer i Guardia pertenecía al racionalismo y pone en marcha multitud de escuelas de la mano de Pestalozzi.
Los principios básicos de la Escuela Moderna son los siguientes:
- Enseñanza mixta: la mayor parte de las escuelas de la época eran no mixtas, se separaba a los niños según su sexo. Esto era el reflejo del fanatismo religioso y su patriarcado radical que marcaba unos determinados roles de género: la mujer era producto del hombre. Ferrer apuesta por la coeducación de sexos como instrumento para combatir la absurda desigualdad entre mujeres y hombres.
- Importancia de la higiene: en la época la suciedad dentro y fuera de las escuelas, era tanta que los niños podían contraer enfermedades fácilmente. Por ello el movimiento higienista del que la Escuela Moderna participa, se preocupa de combatir este problema.
- Enseñanza integral.
- Valor del juego en el proceso de aprendizaje: frente a los modelos de enseñanza donde se impone un cruel aburrimiento y se reprime cualquier método lúdico de aprendizaje, Ferrer señala la importancia del juego como forma de desarrollo libre.
- Enseñanza racionalista: frente al dominio que ejercía la Iglesia católica sobre la vida cotidiana del pueblo, con su moral y su visión del mundo, Ferrer cree que la CIENCIA será la base sobre la que se construirá el nuevo hombre libre.
- La coeducación de clases sociales: este principio fue uno de los que recibió más críticas por parte de seguidores de Ferrer y por otros militantes anarquistas de la época. La enseñanza de raíz libertaria razonan que la enseñanza debe estar al servicio de la clase obrera, pero Ferrer pretende eliminar esas clases sociales de la escuela y hacer una escuela para la sociedad futura.
- Rechazo de premios y castigos: el sinsentido de los castigos y su abuso de gran valor anti-educativo, y la utilización de premios, que promueven entre otros valores la vanidad o la frustración, son rechazados por esta escuela.
Por último veremos la repercusión que tuvo la creación de la Escuela Moderna. Ferrer i Guardia fue fusilado en el año 1909 y esto trajo movimientos revolucionarios en defensa de sus ideales y en contra de su condena. La monarquía y la iglesia fueron los principales enemigos de esta escuela. Sin embargo en los años posteriores y en la modernidad se crearon escuelas a partir del modelo de la Escuela Moderna, aunque con ideales más radicales que libertarios, como ejempló encontramos la Escuela Paideia que defendía el libre pensamiento del niño y le dejaba actuar por si sólo, además esta escuela evito la intrusión política y religiosa en su educación.
El sistema educativo finlandés es uno de los más reconocidos del mundo, sus resultados en los informes PISA muestran el éxito que tiene. Estas son diez de sus claves, que compararemos con el sistema educativo español.
1. Los docentes son profesionales valorados. La educación es una profesión con prestigio y los profesores tienen gran autoridad en la escuela y en la sociedad. El equivalente a Magisterio en Finlandia es una titulación complicada, exigente y larga, que además incluye entrevistas personales, por lo que los maestros son profesionales muy bien preparados y vocacionales.
En España los profesores no gozan de este respeto social, sino que se infravalora y se critica su labor en la escuela. La titulación en España tiene fama de fácil, el que no tiene suficiente nota en selectividad va a magisterio, eso hace que lleguen personas sin vocación y poco cualificadas a los puestos de docencia. Aquí no se hacen entrevistas personales, ni exámenes psicológicos que busquen la excelencia educativa, cualquiera puede ser profesor, pero no maestro.
2. La educación es gratuita y, por lo tanto, accesible a todos. El sistema educativo público establece que la educación es obligatoria y gratuita entre los 7 y los 16 años y debe ser impartida por centros públicos. Tampoco se paga por los libros ni por el material escolar, y todos los niños reciben una comida caliente al día en el colegio, también gratuita. En el caso de que el niño viva a más de 5 kilómetros del centro escolar, el municipio debe organizar y pagar el transporte.
Otra de las pegas en España es el coste educativo, la cantidad de dinero que gastan las familias al año por cada niño es muy superior al gasto en Finlandia. Los libros de texto, el material, las excursiones, el servicio de comedor y matinal, transporte...todo lo pagan las familias, y en el caso de tener un bajo nivel socio-económico no se prestan ni ayudas ni facilidades para los más necesitados.
3. El reparto del dinero público se hace de forma equitativa. Los fondos estatales se reparten de forma justa entre los centros. Hay una base de subvención común para todos pero la cifra final varía atendiendo a las necesidades de cada uno, de manera que se compense a aquellos con más carencias para equipararlos al resto. La igualdad de oportunidades es un valor esencial.
Ni que decir tiene la baja inversión que España hace en educación, los fondos se reparten de forma desigual, se destina dinero a proyectos inacabados y poco seguros, que hace que lo poco que se invierte sirva para poco.
4. El currículo es común pero los centros se organizan. Cada escuela y sus profesores diseñan y organizan el currículo (aunque tiene unas líneas generales y un marco común para todos) y se planifican para conseguir los logros establecidos como mejor consideren.
Aquí no sólo tenemos un currículo por comunidad, sino que además no se organiza el contenido de estos. No se prepara un temario, ni se adapta a las necesidades educativas, sino que se recurre al libro de texto.
5. La educación se personaliza. Desde los primeros cursos se interviene para apoyar a los alumnos con necesidades especiales, con lo que se evita que sus dificultades aumenten con los años y se minimizan los porcentajes de fracaso escolar. Se respeta el ritmo de aprendizaje de cada niño y se huye de las pruebas y actividades estandarizadas. Además, los profesores suelen ocuparse del mismo grupo desde 1.º (7 años) hasta 6.º (12 años), lo que ayuda a que los conozcan mucho mejor.
En España, es normal ver que cada año se cambie de profesores, lo que hace que no se llegue a conocer al niño y que pase de curso con problemas que tal vez han quedado sin resolver. Las pruebas aquí son estandarizadas y se tienen muy en cuenta, en una sociedad que critica el aprendizaje memorístico, todavía la práctica demuestra lo contrario.
6. Los alumnos tienen tiempo para todo. La educación se toma en serio pero también se da importancia al juego y al descanso. Los niños no comienzan el colegio hasta los 7 años, momento en el que se les considera maduros para aprender. Además, las jornadas lectivas son más cortas. Los estudiantes de Primaria tienen solo 3 o 4 clases al día, con descansos de 15 minutos entre cada una de ellas a los que se suma el descanso para comer. Apenas hay deberes, el trabajo se hace en clase, no en casa.
Aquí la carga de trabajo va desde 6 horas por la mañana hasta las 2-5 horas por la tarde, entre deberes y actividades extraescolares. Los niños apenas tiene tiempo para jugar y descansar, y eso hace que además pierdan motivación e interés, pues acaban las jornadas demasiado cansados.
7. Preparar la clase es parte de la jornada laboral. Los profesores no imparten tantas horas de clase como en otros países, sino que el tiempo que pasan en el aula es más reducido y destinan las horas restantes a preparar sus lecciones, investigar, organizarse o trabajar de forma colaborativa con otros docentes.
En nuestro sistema el trabajo conjunto es muy limitado, las jornadas de clase son más largas y apenas se dedica tiempo a la planificación de las clases o a la investigación educativa.
8. Se evita la competencia y las cifras. Los estudiantes no hacen exámenes ni reciben calificaciones hasta 5.º curso (11 años) y los informes que el profesor elabora para los padres son descriptivos, no numéricos.
Aquí una nota no es un número es una valoración de la inteligencia relativa. Los niños reciben calificaciones desde bien pequeños, y en ocasiones se compara con el resto. Esto provoca baja autoestima en muchos niños o pigmaliones negativos que hacen que alrededor de su aprendizaje se cree una barrera.
9. Se premia la curiosidad y la participación. La imaginación y la capacidad de emprendimiento son muy apreciadas en la sociedad finlandesa, abundan los profesionales de campos artísticos y creativos y también los de tecnología e ingeniería. Esto también se fomenta en la educación, donde se valora la creatividad, la experimentación y la colaboración por encima de la memorización y las lecciones magistrales.
En general el docente valora poco la curiosidad y la iniciativa del niño, lo importante es dar la lección de ese día y asegurar que los contenidos perduran en la memoria del niño.
10. Los padres se implican. La sociedad y las familias consideran que la educación es fundamental y la complementan con actividades culturales. A esto contribuyen las ayudas que reciben los padres para la conciliación de la vida laboral y familiar, para que dispongan de más tiempo con sus hijos.
Una de las principales causas de la poca implicación de las familias en la escuela es la falta de tiempo. Esto se debe a que cada vez son más los padres y madres que tienen jornadas de trabajo difíciles de compatibilizar con las reuniones y los temas concernientes a la escuela de sus hijos. Además no se dan facilidades para poder pasar tiempo con ellos y preocuparse por su desarrollo intelectual. Los padres tienen muchas veces un desconocimiento parcial del bagaje escolar de sus niños.